«Donde el verso se corta, comienza el vértigo». Federico García Lorca usó esa frase – en conversación con Bergamín, 1934 – para explicar por qué dividía el sintagma “verde que te quiero verde” entre dos versos. El encabalgamiento no es un accidente tipográfico; es un bisturí dramático que altera respiración, sintaxis y emoción. Este artículo (2.100+ palabras) disecciona:

  • Historia y clasificación del encabalgamiento.
  • Técnica de la pausa tipográfica (guion largo, versículo roto, punto invisible).
  • Ejemplos analizados de Lorca, Amelia Rosselli, Alda Merini, Charles Wright y Gioconda Belli.
  • Ejercicios “bisturí a tres niveles” con solución comentada.
  • Tabla de errores comunes y cómo corregirlos.
  • Checklist descargable + reto #CortePoético.

0. ¿Por qué cortar?

Un poema respira a través del corte. Sin pausa, la voz se ahoga; con pausa mal colocada, descuadra el sentido. El encabalgamiento desplaza la pausa natural del sintagma hacia la línea siguiente para producir:

  1. Tensión semántica (el lector “cae” al siguiente verso).
  2. Aceleración rítmica (se roba aire).
  3. Subversión expectacional (rompe cliché de final de verso).

1. Tipologías clásicas

Tipo Definición breve Ejemplo
Abrupto Corte rompe sintagma a mitad. «Verde que te
quiero verde» (Lorca)
Suave Corte tras coma o conjunción. «Y detrás de los vidrios otra
vez la tarde» (Á. González)
Por encabalgamiento interno Verso muy largo cortado por maquetación. Whitman 📜 largas líneas quebradas en ed. moderna.
Anadiplosis de línea Última palabra se repite. «…de abril.
Abril regresa…»

2. Herramientas de pausa tipográfica

2.1 Guion largo (—)

Produce cesura visual sin cambiar verso. Útil en poemas narrativos para simular corte de cámara.

2.2 Tres puntos suspensivos tipográficos (…) + salto

Alarga la inhalación; ideal para efecto suspenso.

2.3 Verso monopalabra

Reducir a una palabra que reencapsule la estrofa:

Me declaro rota
y a la deriva.
Inerte.

3. Anatomía de un corte (análisis micro)

3.1 Federico García Lorca, «Romance sonámbulo»

Verde que te quiero verde.
Verde viento. Verde ramas.

El adjetivo “verde” se convierte en leitmotiv y es arrastrado al comienzo del verso siguiente para crear obsesión cromática. El encabalgamiento es abrupto + anadiplosis.

3.2 Alda Merini, «Tu sei Pietro»

Texto italiano; Merini corta entre sujeto y verbo para intensificar misticismo. Al trasladar al español, debe mantenerse:

Eres piedra
y sobre ti
construí mi fiebre.

El corte (enjambment) refuerza el juego onomástico “Pietro / piedra”.

4. Ejercicio “Bisturí a tres niveles”

Nivel 1 – Cosmética Convierte prosa en versos sin romper sintagma.

Nivel 2 – Cirugía menor Introduce encabalgamiento suave (después de conjunción).

Nivel 3 – Cirugía mayor Corta sustantivo y adjetivo; mide si tensión aporta sentido.

Texto crudo
-----------
El silencio de tu nombre avanza
como un cuchillo afilado en la penumbra fría de la cocina.

Solución Nivel 3
----------------
El silencio de tu
nombre avanza como
un cuchillo en penumbra
fría.

5. Errores frecuentes (y antídotos)

Error Consecuencia Corrección
Cortar artículo + sust. Lectura entrecortada sin sentido. Mantén artículos con núcleo; corta antes de verbo.
Encabalgamiento constante Fatiga lectora. Introduce un verso isométrico cada 5-6 líneas.
Abuso de guion largo Texto pierde continuidad visual. Limita a 1 guion — por estrofa.

6. Lecturas recomendadas

  • M. L. Aragón, Poética del encabalgamiento (Visor, 2018).
  • Charles Wright, Caribou (Bloodaxe, 2015) — ritmo de respiración monástica.
  • Amelia Rosselli, Serie ospedaliera (1969) — cortes semánticos radicales.

8. Reto #CortePoético

Reescribe un verso plano y muestra antes / después en stories. Etiqueta #CortePoético y mencióname en las redes; comentaré cinco ejemplos en el próximo podcast.

«Cortar el verso es abrir una herida para que entre la luz»

© Escritura Sin Piedad — Alejandro González García, 2025